Hola, mi nombre es Katrine y soy de Dinamarca. Fui de intercambio a Chile cuando tenía 16 años en 2018 y viví por un año en su capital, Santiago, con una familia anfitriona maravillosa.
Antes de mi intercambio en Chile, mi visión del mundo era muy limitada. Había vivido toda mi vida en una pequeña burbuja. Cuando embarqué en el vuelo que me llevaría a Chile, no podía imaginar que este sería solamente un pequeño paso hacia un cambio total de mi percepción del mundo.
Mi año en Chile fue sin lugar a dudas el mejor año de mi vida. Decidí hacer mi intercambio en Chile para conocer una cultura diferente y aprender a entender el mundo que me rodea. En Chile, me sentí muy acogida por todas las personas con que me encontré, quienes siempre me recibieron con mucho cariño y se convirtieron en mi familia y amigos para toda la vida. Chile alberga muchas bellezas, con paisajes muy diferentes entre sí que uno nunca hubiera podido soñar. Fui muy afortunada al tener la oportunidad de conocer los paisajes de Chile tanto con mi familia anfitriona como con YFU Chile. Mi año de intercambio estuvo lleno de felicidad, personas maravillosas, arte y aventuras.
Pero a pesar de ello, también me tuve que enfrentar a momentos difíciles, los cuales me enseñaron mucho sobre mi misma, el mundo y finalmente me ayudaron a convertirme en la persona que soy hoy. Aprendí a defender mis propios intereses, me convertí en una persona mucho más independiente y aprendí a adaptarme a diferentes circunstancias y tomar decisiones en momentos difíciles. Muchas de estas cosas no habrían sido posibles sin el apoyo de YFU Chile y sus voluntarios.
Una de las cosas que definitivamente llevo conmigo es saber vivir el momento. No puedes vivir en el pasado o en el futuro durante un intercambio. Eres consciente de que el tiempo en el país es limitado y te das cuenta de la importancia de vivir el presente y saber disfrutarlo. Atesoro cada una de las experiencias que viví en Chile y llevo conmigo los recuerdos de cada día. Fui a Chile sin conocer siquiera una palabra en español y regresé a Dinamarca hablándolo fluido. Mi año estuvo repleto de risas, lágrimas y si tuviera la oportunidad no dudaría en vivirlo nuevamente.