YFUers en tiempos de pandemia- Antonia Ordoñez

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Este mes tendremos la oportunidad de conocer a un miembro muy activo de nuestra comunidad, ella es Antonia Ordóñez Poblete, psicóloga y voluntaria de YFU desde el 2010. Antonia realizó su intercambio y una pasantía (Dinamarca 2012-2013) con YFU, pasando por diferentes roles en nuestra comunidad a lo largo de los años. Actualmente es parte del directorio desde el 2018.

¿En qué año y a qué país viajaste de intercambio?

Elegí irme con YFU a Alemania a los 14 años, luego de ir en patota -mi familia y yo- a conocer la oficina. El 2009 esa patota me fue a dejar al Aeropuerto y nos vimos un año después en el mismísimo Arturito Merino Benítez. 

Elegí Alemania, porque en esa época, fascinada por la historia de la postguerra, quería conocer de primera fuente un país que logró reinventarse desde la ruina: ¿Qué clase de especímenes buenos para el fútbol logran algo así?

Cuéntanos un poco de tu intercambio, ¿cuáles fueron los aprendizajes más importantes?, ¿cómo recuerdas esta experiencia?

Mi intercambio cambió el rumbo de mi vida.

Me acogieron dos familias en Alemania: una familia de Brühl por el mes de curso de alemán al inicio de mi experiencia, y luego, una familia del este de Berlín. De mi primera familia tengo lindísimos recuerdos y una mamá anfitriona que ya no está entre nosotros, luego de una dura y rápida enfermedad. A mi familia de Berlín la saludo con frecuencia y espero visitarlos apenas la pandemia lo permita.

Antes de embarcarme en ese avión no había reflexionado acerca de otras formas de ser familia, de mostrar cariño, de cocinar, ni de aprender en el colegio. No me había dado cuenta lo insignificante que soy, cuando pones la inmensidad de realidades en el mundo como plano de perspectiva. Fue una lección de humildad y valentía impagable. 

Estoy muy agradecida por la oportunidad.

Me recibió una familia que me quiere y que el 2009, caminó conmigo las calles de Berlín para celebrar los 20 años desde la caída del muro de Berlín. Vi caer un dominó gigante en conmemoración de la paz y la unidad de un pueblo una vez dividido.

No sé qué experiencia más YFU que esa: unidad, respeto, paz, prosperidad, conciliación.

 

¿Cómo crees que haber vivido el intercambio te convirtió en la persona y el profesional que eres hoy?

Creo que mis experiencias con YFU me han convertido en una persona más abierta y flexible. No le tengo miedo a nuevas aventuras, a hacer los cambios que necesito en mi vida, a probar caminos con circunstancias más inciertas, y a ser resiliente, porque no siempre todo sale bien.

Creo que estoy forjando un camino profesional que es “out of the box”, y eso me gusta. 

Además, como psicóloga del trabajo y las organizaciones, pongo en práctica este set de herramientas a diario cuando lidio con situaciones complejas en la oficina: cuando me toca empatizar con otros, proponer proyectos, encontrar aliados y formar alianzas, dirigir equipos, y también reconocer un error o dar un paso al lado.

¿Cómo ha impactado la pandemia en tu vida personal y en tu trabajo?

¡Qué desafiante que ha resultado este tiempo!, especialmente para quienes trabajamos en las áreas de gestión de personas. Tanto dolor que nos toca ver alrededor, y tantas acomodaciones que tuvieron que hacerse muy rápido. Definitivamente una prueba para todos esos equipos.

Aunque ha sido tremendamente duro este tiempo, la verdad es que veo el contexto actual como una oportunidad. 

Tuve la suerte de ganar una beca ERASMUS, así es que parto a hacer una maestría a Europa en la que espero estudiar y trazar las líneas que irán definiendo cómo se configura el diseño y experiencia del trabajo hacia el futuro.

¿Crees que tu intercambio YFU te preparó de algún modo para sobrellevar la pandemia?

Definitivamente sí. 

Un YFUer se adapta a nuevos contextos, llenos de requerimientos y códigos de relación nuevos. 

Un YFUer se sobrepone a la adversidad, porque no todos los días son fáciles, y además, un YFUer sabe que si hoy la vida se siente difícil, eso está bien y es normal. Está viviendo un proceso emocional, y mañana (¡o pronto!) se sentirá mejor y habrá aprendido algo.

En definitiva, Un YFUer ve oportunidades donde otros ven problemas.

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